El PSOE vota en el Congreso en contra de la devolución del Premio Nacional Taurino propuesto por el PP

La iniciativa no destacó con el voto en contra de los socialistas y Sumar, además de los grupos catalanes. Se trata de la primera vez en las Cortes que el PSOE vota en contra de la restitución del premio, ya que el pasado mes de mayo en el Senado se abstuvo en un movimiento similar.

La supresión del Premio Nacional Taurino fue anunciada a principios de mayo por uno de los socios de gobierno, el ministro de Cultura, Ernest Urtasun. Esta decisión generó críticas al responsable del departamento de cultura, incluso de algunos destacados dirigentes socialistas como el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page.

Durante el debate sobre estos temas en el Congreso, el delegado del Grupo Popular, Eduardo Carazo, reclamó el apoyo de los socialistas, insistiendo en que los populares no están «a favor de la censura de nadie». “Ustedes parecen estar a favor en unos casos sí y en otros no, dependiendo del tipo de cultura que tratemos”, lamentó.

La gente criticó la gestión del Ministro de Cultura, Ernest Urtasun, quien se caracterizó «por su radicalidad y sectarismo ideológico». «Parece más dividir que resumir, pero eso no nos sorprende: la cuestión es dónde está situado el Partido Socialista, porque no nos declaramos los mejores que utiliza», afirmó.

Carazo fue más allá y propuso que el Premio Nacional Taurino sea organizado por la Concejalía de Asuntos Culturales, que se creó para «enfrentarse al ministro de Sumar». «Es fácil, porque depende directamente del presidente del Gobierno y está encabezado por un socialista: seguro que agradecerá a muchos aficionados taurinos que votaron al PSOE», afirmó.

EL PSOE LAMENTA EL «MANOSEO POLITICO»

Por su parte, desde el Grupo Socialista, la diputada Maribel García criticó a los populares porque entiende que «lo peor que le puede pasar» en el toreo es «el manoseo político». «Sí, eso es lo que quiere el PP, gestionar el toreo», añadió.

García garantizó que su formación seguirá defendiendo que todas las manifestaciones culturales legalmente protegidas «pueden ser consumidas por quien quiera», aunque insistió en la necesidad de plantar un debate «con respecto a lo que importa» entre la gente.

El diputado socialista afirmó que el toreo constituye «un sector económico de primer orden», por ejemplo en comunidades como Extremadura, pero «al ser un concepto legalmente protegido, nadie está obligado a seguirlo». «Te puede gustar o no, igual que puedes seguir la tradición o no, como muchas otras tradiciones, hechos y productos culturales que existen en España», argumentó.

Por el Grupo Sumar, el delegado Gerardo Pisarello confirmó el rechazo a esta propuesta y consideró que el hecho de que desde hace 40 años el franquismo «no haya rechazado esta crueldad» del toreo «no condena» a la sociedad actual a seguir manteniéndola.

«Tan importante es educar a nuestros jóvenes en el amor a los animales como sensibilizarlos contra la violencia que se comete contra personas con discapacidad, inmigrantes o en situación de vulnerabilidad», ha apuntado, tras añadir que apoyan las fiestas populares, pero que «no naturalizar lo romanticen la crueldad».

UNA DECISIÓN “CONTRA LOS VOTANTES” DEL PSOE

Por su parte, el delegado de Vox, José Ramírez, señaló que la supresión del Premio Nacional Taurino por parte del ministro Urtasun «demuestra en una sola decisión las razones por las que este Gobierno de coalición es absurdo».

«Un gobierno en el que las decisiones no se tomaron contra la mitad de la población que este gobierno decidió no representar, incluso contra una parte denominada específicamente alta de los propios votantes del Partido Socialista que también son fanáticos del toro», concluyó.