El grupo de la disidencia de las FARC Segunda Marquetalia ha informado este sábado de un acuerdo con el Gobierno de Colombia para un «alto el fuego unilateral», que prevé la liberación de cautivos tras las negociaciones con el Ejecutivo.
En un comunicado que ha hecho público la emisora Caracol en redes sociales, el grupo ha confirmado la firma de un acuerdo de «medidas tempranas de desescalamiento del conflicto» entre ambas partes, por el que la Segunda Marquetalia-EB se compromete a «no permanecer armada ni uniformada», a entregar a «las personas que tenga retenidas» y a respetar a la población civil, «especialmente, a las comunidades de protección constitucional».
Este anuncio llega después de que el Gobierno de Colombia iniciara este lunes en Caracas las primeras conversaciones de paz con la disidencia de las FARC Segunda Marquetalia, liderada por aquellos que se desligaron de los acuerdos de paz de 2016 dos años después por el incumplimiento de los mismos por parte del ejecutivo del entonces presidente Iván Duque.
El pacto incluye asimismo la creación de una subcomisión técnica con ambas delegaciones negociadoras para la georreferenciación en los municipios donde la Segunda Marquetalia-EB tenga presencia, la suspensión de las operaciones militares ofensivas, programas de reforma agraria integral y de restitución de tierras y un paquete de medidas para la reparación de las víctimas del conflicto, elaborado conjuntamente por el Gobierno y la disidencia.
Este acuerdo se presentará a las comunidades de Tumaco, en Nariño, de cara a la identificación de proyectos sociales y económicos de impacto rápido, en una reunión «a más tardar el 20 de julio», con representantes de las dos partes, los países garantes, la Misión de Verificación de la ONU y la Conferencia Episcopal Colombiana.
En la nota el grupo disidente ha destacado «el ambiente propositivo y constructivo» de las dos delegaciones en aras de llegar acuerdos para la paz en Colombia. Asimismo, ha agradecido el apoyo de los países garantes: Cuba, Noruega y, en especial a Venezuela –«por su generosa hospitalidad en este primer ciclo» de negociaciones–, así como a la Conferencia Episcopal y a la Secretaría General de Naciones Unidas.
La Segunda Marquetalia –que toma su nombre del lugar de origen de las FARC, allá por 1964– mantiene una enconada disputa con otros grupos armados, especialmente con la otra disidencia del Estado Mayor Central (EMC), quienes no se consideran como tal, pues nunca se sumaron a los acuerdos de paz de La Habana.
El de Segunda Marquetalia será el tercer proceso de paz iniciado por el jefe del Ejecutivo colombiano, Gustavo Petro, después de los del ELN y el EMC.
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