Este ataque se suma a una serie de operaciones militares que han aumentado en las últimas semanas, tanto en la Franja de Gaza como en Cisjordania. Según las FDI, los objetivos de los bombardeos incluían "túneles", "almacenes de municiones" y "sedes operativas" de organizaciones terroristas. Además, se informó que un miembro de la fuerza naval de Hamás fue "eliminado" durante los ataques.
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En la madrugada del pasado viernes, las Fuerzas de Defensa de Israel llevaron a cabo bombardeos en la ciudad de Jan Yunis, dejando al menos 21 palestinos muertos y 79 heridos. |
Sin embargo, la comunidad internacional y diversas organizaciones han cuestionado la proporcionalidad y legalidad de estos ataques. Un grupo de relatores especiales de Naciones Unidas lamentó la "inacción de la comunidad internacional" ante lo que consideran crímenes de guerra cometidos por Israel. Las autoridades de la Franja, controlada por Hamás, han cifrado en más de 3.800 los muertos por los bombardeos israelíes contra el enclave.
Además de los objetivos militares, infraestructuras civiles como mezquitas y iglesias también han sido afectadas. La mezquita de Al Omari en el norte de la Franja de Gaza quedó completamente destruida, según informaciones de la agencia palestina de noticias Maan. Un ataque previo también afectó la iglesia ortodoxa griega de San Porfirio, la más antigua en la Franja, que servía como refugio para cientos de desplazados y sufrió graves daños materiales.
El conflicto ha ahondado la crisis humanitaria en Gaza. Naciones Unidas y diversas ONG han alertado del deterioro de la situación a causa del "cerco total" impuesto por Israel. Según estas organizaciones, unas 1.400 personas murieron y más de 200 fueron secuestradas en los ataques del grupo, respaldados por Yihad Islámica.